Preparación:
1. Para preparar la masa de los ñoquis, vierta la nuez moscada, la manteca, la
sal, la pimienta y 125 ml de agua en un recipiente, y lleve a ebullición. Incorpore
la harina gradualmente y remuévala con una cuchara de madera para obtener
una bola que se separe de los dos lados del recipiente. Pase la masa a un bol,
déjela enfriar y agregue los huevos uno a uno; bátalos bien hasta deshacer todos
los grumos. Incorpore entonces el queso y resérvelo.
2. Para preparar la salsa besamel, funda la manteca en una sartén a fuego lento
y añada la harina; remueva hasta obtener una masa suave y homogénea, y
cuézala 3 minutos. Retírela entonces del fuego y déjela enfriar. Mientras, en un
recipiente hierva la leche e incorpórela, batiendo, a la mezcla ya fría, luego
llévela a ebullición a fuego lento, sin dejar de remover para que no se formen
grumos. Retírela del fuego, añada el jamón y queso y condimente con sal y
pimienta negra.
3. Precaliente el horno a temperatura baja (160°C). Lleve a ebullición agua con
sal y prepare un recipiente grande con agua fría. A continuación, llene una manga
pastelera de boquilla normal mediana con la masa y deje caer ésta en el agua
hirviendo, cortando trozos de 25 cm de longitud con un cuchillo. Una vez los
ñoquis floten en la superficie; cuézalos 30 segundos justos, y retírelos del fuego.
Tras pasarlos por el agua fría, escúrralos y dispóngalos sobre un paño
limpio.
4. Unte una fuente para horno con manteca y espolvoréela con sal y pimienta
negra recién molida. Vierta una cuarta parte de la salsa de besamel, luego
disponga los ñoquis en capas, revistiendo cada capa con un poco de salsa, y
acabando con una capa de salsa. Hornee durante 10 minutos, luego aumente la
temperatura hasta unos 200°C, y gratine los ñoquis hasta que la parte superior
esté bien dorada.
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