Los hallazgos experimentales, la mayor parte de ellos procedentes de
experimentos con ratones, no ameritan todavía un cambio en la dieta, pero
indican que hay algunas formas en que la gente puede reducir aún más su riesgo
de contraer la enfermedad.
Ann Bode y Zigang Dong, de la Universidad de Minnesota, señalaron que usaron
un extracto de jengibre en ratones a los que se habían inyectado células de
cáncer de colon humano. Los ratones con esta inoculación casi siempre
desarrollan tumores.
Pero cuando se los alimentó con extractos de (6)-gingerol, la sustancia
responsable del sabor picante del jengibre, menos ratones presentaron
tumores.
El tabaquismo es la causa número uno de cáncer prevenible en muchos países,
entre ellos Estados Unidos, y en el mundo industrializado los expertos están
comenzando a coincidir en que una dieta deficiente y la falta de ejercicio se
acercan con velocidad en un segundo lugar.
Sin embargo, los investigadores que presentaron sus ponencias en la reunión de
la Asociación de Investigación de Cáncer de Estados Unidos, celebrada en
Phoenix, dijeron que se sentían animados para hallar maneras de reducir aún
más el riesgo.
«Estos estudios son extremadamente importantes y deben continuar para
ayudarnos a entender mejor las maneras de prevenir el cáncer que no requieren
medidas extraordinarias», dijo en un comunicado Raymond DuBois, de la
Universidad de Vanderbilt, en Nashville, quien dirigió la reunión.
Otros estudios han revelado las bondades del té verde y algunas hierbas chinas
para prevenir algunas formas de cáncer.
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