Hace 12 años, el Departamento de Agricultura del gobierno de EEUU creó un
folleto en el que se ilustraba gráficamente a todos los ciudadanos sobre cuál era
la dieta idónea para una buena salud: la pirámide alimenticia.
«Luego cruzaron sus dedos y esperaron a que los americanos comieran mejor…
Esto claramente no ha sido suficiente. Lo que necesitamos son investigaciones en
programas y cambios en políticas y en entornos alimenticios que ayuden a los
americanos a comer mejor y vigilar su peso», explica Margo Wootan, directora de
política alimenticia del Centro para la Ciencia del Interés Público, un grupo de
apoyo a la salud.
Ahora mantener una ingesta equilibrada de nutrientes no es suficiente para un
estilo de vida saludable, según han informado Tommy G. Thompson, secretario
del Departamento de Salud y Servicios Sociales, y Ann M. Veneman, secretaria de
Agricultura, al anunciar las nuevas guías. Ambos han manifestado que muchos
estadounidenses están consumiendo demasiados alimentos, y apuntan que casi
dos tercios de todos los ciudadanos tienen sobrepeso u obesidad.
Las guías se basan en recomendaciones de un panel de 13 científicos y doctores
que se han pasado casi un año revisando la salud y la dieta de los
norteamericanos. El comité ha dicho que las personas llevan unos estilos de vida
sedentarios y eligen mal su comida, dando lugar a un exceso de
calorías.
Consejos de las guías de salud
Para prevenir «un aumento gradual e insano de peso en el adulto», se recomienda
una actividad física de 60 minutos al día y de hasta 90 minutos si se quiere perder
peso y controlar el número de calorías (sin limitar los carbohidratos, como
recomiendan algunas dietas) es la clave para controlar el peso.
Las nuevas guías recomiendan además reducir la ingesta de grasa entre el 20% y
el 35% del total de las calorías, y la mayoría de las grasas deben de provenir de
alimentos como el pescado, frutos secos y aceites vegetales.
También ofrecen otros consejos como la elección de los cereales integrales frente
a los refinados para reducir el riesgo cardiaco, y no azucarados si se toman en el
desayuno para ayudar a mantener el peso; así como el consumo de la fruta y
verdura por piezas y no mediante la ingesta de jugos.
«A la gente le gusta comer», comenta uno de los científicos del panel, el doctor F.
Xavier Pi-Sunyer, director del Centro de Investigación de la Obesidad del Centro
Médico Luke’s-Roosevelt en Nueva York. «La comida está disponible. Es
relativamente barata. Es desigual. Sabrosa. La gente no está particularmente por
la labor de hacer ejercicio. Nuestra sociedad lo hace difícil. Es una batalla difícil»,
comenta.
Este experto dice que cuanta más publicidad se le dé a las nuevas guías, más
personas comenzarán a comprender cómo se relacionan la buena nutrición y el
ejercicio con un menor riesgo de muchas enfermedades y achaques, como la
diabetes o los trastornos cardiacos.
Aunque el 80% de los estadounidenses reconocía la pirámide alimenticia, pocas
personas sabían qué hacer con la información que ésta ofrecía sobre el número y
tamaño de las raciones de alimentos. El comité habla ahora de tazas en lugar de
raciones en muchas ocasiones; con esta medida, una persona debería tomar una
media de cuatro tazas de frutas y verduras para mantenerse en su
peso.
«Si bebes un jugo de naranja, comes un plátano, tomas una ensalada con una de
tus comidas y en la cena, ahí tienes los vegetales», comenta Robert Earl, director
senior de política nutricional de la Asociación Nacional de Procesadores de
Alimentos.
Las nuevas guías, que dirigen la política del gobierno en programas como los
almuerzos escolares, dan además más énfasis en los productos lácteos
desgrasados y también aconsejan al público comer dos raciones de pescado a la
semana.
Otro aviso es reducir la cantidad de sal a una cucharilla de café diaria y para
aquellos que beben alcohol, que lo hagan con moderación, alrededor de una
bebida al día en las mujeres y dos en los hombres.
Por último, otra innovación son los consejos que hacen a determinados grupos de
la población como los niños, embarazadas, personas con sobrepeso, etc.
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